Las incongruencias de la política en México
AUGUSTO HUGO PEÑA DELGADLLO Dossier ahpd 1381 Abril 22 del 2017
Las incongruencias de la política en México, son quizá los más graves problema por los que atraviesa nuestro país y los mexicanos. ¡Imagínese! El presidente del PRI pide investigar los nexos de López Obrador con Javier Duarte, cuando el PRI/Gobierno debería evitar la simbiosis de los gobernadores rateros, del propio PRI y del mismísimo Peña Nieto.
Javier Duarte no es el único ni el más ratero de los políticos dentro del PRI; los hay por montones y peores que Duarte, Duarte se derrumbó por codicioso y pendejo, pero Peña Nieto tratará de ayudarlo como lo hizo con Humberto Moreira, otro caso de la patología priista. (Por ello se dice*) Que hay que estar alertas ante las triquiñuelas para la extradición de Duarte.
Los priistas siguen apostándole a su propaganda falsaria porque dan por hecho que los mexicanos somos bien güeyes. El caso del imbécil de Ochoa Reza que quiere investigar la relación de Javier Duarte con López Obrador, cuando lo que debería hacer –como presidente del PRI- es empezar a limpiar la enorme cloaca en la que su partido se ha convertido, porque es innegable que desde la presidencia hasta el más modesto de los miembros del PRI, no solo están coludido para robar al pueblo sino que se han convertido –desde hace 34 años- en una bola de mugre que de manera simbiótica ha ido creciendo al grado que ya es imposible saber en dónde empieza la delincuencia si en el PRI/gobierno, o si la delincuencia organizada es la que se adueñó del PRI/Gobierno.
En Coahuila no carecemos de imbéciles priistas, los hay a pasto, mencionaré algunos: El candidato a la gubernatura del PRI, Miguel Riquelme dice que él sí sabe gobernar, cuando dejó un tiradero en Torreón siendo alcalde y robó lo que quiso. Como funcionario del gobierno del estado, se robó mil 200 millones de pesos, fraude que está debidamente documentado e incluso está denunciado ante la PGR. Riquelme agrega: -para continuar engañando a la gente- “Yo sí sé que hacer, haré menos política y más carácter”. ¿Menos política? Si el pobre diablo no sabe que la política es una ciencia y un arte y no la forma de engañar, robar, mentir y defraudar al erario. Además dice que: “Lo primero que haré es dejar de estar manteniendo con el dinero de Coahuila a otros estados”, este idiota no sabe lo que dice, porque no depende de ningún gobernador ni de todos juntos que hacer con el dinero recaudado por el gobierno federal. Se requeriría que el Congreso de la Unión lo apruebe y, después de eso, que la mitad de los congresos de los estados más uno, lo aprueben.
Otra imbecilidad, de otro coahuilense, Rubén Moreira, pagó para que se publicara en los diarios y por las redes del internet, y circulara la noticia –noticia pagada con dinero robado al erario- que el gobierno del estado a su cargo, ha exonerado a Humberto Moreira de cualquier desvío de fondos públicos estatales. Rubén Moreira no es NADIE para exonerar a un pillo consuetudinario como Humberto Moreira, su hermano, quien está acusado en varios condados de Texas y uno de Florida, por lavado de dinero robado de las arcas del estado de Coahuila, por ligas con el crimen organizado y por narcotráfico y ligas con la organización de delincuentes, los ZETAS. Y es más, el propio Rubén Moreira está reclamado por fiscales de Texas, por haber recibido millones de dólares –igual que su hermano Humberto- de parte de los Zetas, tanto para su campaña como para su bolsillo y los de sus cómplices que no son pocos.
Humberto Moreira –también coahuilense. Emite un día sí y otro también, declaraciones tan o más imbéciles que las de Riquelme y su hermano Rubén: Dice en su campaña para ocupar una curul en el estado de Coahuila, amparado en El Partido Joven, un partidito que por un lado huele a Moreira porque Humberto lo formó con cómplices pagados -con dinero robado del erario coahuilense-, y por otro, a excremento político, que lo hace por la gente. Eso, en excremento es en lo que han convertido la política y la cosa pública, la pandilla de los Moreira, a quienes, por alguna razón que ignoro, pero que para algunos analistas es obvia, Peña Nieto y el PRI los defienden a capa y espada contra la ley, cubriéndolos con el manto de la impunidad que ellos mismos han tejido.
Por todo esto y mucho más, se me hace execrable y falto de congruencia, que el propio señor Ochoa Reza, presidente del PRI, diga que hay que investigar los nexos entre Javier Duarte y MORENA, cuando lo que habría que investigar son los nexos de Javier Duarte y Peña Nieto a quien le envió 25 millones de pesos para su campaña, y la probable colusión, entre el propio Duarte con Alfredo del Mazo Maza –candidato del PRI al gobierno del estado de México- a quien le envió 40 millones de dólares, los que, porque les quemaron las manos, los abandonaron en el aeropuerto de Toluca -dado el escándalo mayúsculo en el que Duarte está metido-. Por ello, los mencionados 40 millones de dólares, reitero, aparecieron –como milagro- en el aeropuerto de Toluca en maletas repletas de billetes norteamericanos nuevecitos. Estas y más complicidades de Javier Duarte con priistas y no priistas, son las que deberían investigar, tanto la PGR como la gente decente del PRI –si es que todavía quedan algunos-, y otras instancias del Estado mexicano. Preguntémonos, ¿Peña Nieto y Raúl Cervantes, preside el uno y procura justicia el otro, o son solo los nudos ciegos con los que el entramado mafioso nos está ahorcando? O, ¿usted qué opina, apreciable lector?
(Por ello se dice*) José Lavanderos por Abogados para la justicia y los Derechos Humanos. La jornada Abril 20 de 2017 en. El Correo Ilustrado
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Atenta y respetuosamente
Augusto Hugo Peña D.
Ah.pd@hotmail.com
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