Augusto Hugo Peña D.

Suena un tanto increíble pero es muy cierto, panistas, priistas y la ciudadanía se han unido en contra de los Moreira

AUGUSTO HUGO PEÑA DELGADILLO Dossier ahpd 1367   Abril 10 del 2017

Desde agosto del 2015, un grupo de ciudadanos incluyendo a priistas, a panistas y a miembros de otros partidos, nos hemos reunido –semanalmente- más de 80 veces con el único fin de buscar electoralmente la forma de cerrarles el paso a los Moreira, debido al enorme daño socioeconómico y político que le han causado a Coahuila y sobre todo a La Laguna. Ese era y es nuestro único objetivo, expulsar por vía electoral a los Moreira de la cosa pública.

Suena un tanto increíble pero es muy cierto, panistas, priistas y la ciudadanía se han unido en contra de los Moreira para que su empleado Riquelme no logre el triunfo en Coahuila. También en increíble que Peña Nieto se obstine en no dejar a su suerte a los nefarios Moreira.

Ha sido una tarea ardua que hemos llevado a cabo –semanalmente- durante más de 22 meses. Nos hemos reunido con decenas de grupos y personalidades para exponerles nuestro cometido y, al parecer hemos avanzado mucho, no tanto como hubiésemos querido pero si lo suficiente para blindar a Torreón de un triunfo del PRI en el estado, de no permitir, reitero, electoralmente, que Migue Ángel Riquelme logre llegar a ser el próximo gobernador, porque amén de considerarlo un fardo inerte de la política estatal que depende de la fuerza corrupta y corruptiva de los Moreira, y porque él personalmente no llena siquiera los mínimos requisitos para ser gobernador de Coahuila. Su única gracia es ser cómplice incondicional de Humberto y Rubén Moreira.

Peña Nieto desde la presidencia autorizó a Rubén Moreira para que impulsase la candidatura al gobierno del estado a Miguel Ángel Riquelme para continuar haciendo el mismo papel de tapadera de los fraudes al erario, que Rubén practica y encubre a su hermano Humberto. Los Moreira no están solos, cuentan con la colusión implícita de Peña Nieto, quien le debe favores millonarios a Humberto quien le apoyó con dinero robado del erario para su candidatura en el 2012. Pero en el PRI existe la percepción que el haber apoyo de parte de Peña Nieto a los Moreira, fue un error garrafal porque les hará, irremediablemente, perder otro estado como los muchos que perdieron ante el PAN/PRD en junio pasado. Grupos opositores a los Moreira dentro del PRI, se están movilizando por medio de la candidatura “independiente” de Javier Guerrero. Es tanto el temor del PRI en perder el gobierno de Coahuila y mayor es el repudio a los Moreira, que han enviado a Coahuila a Carlos Rojas como jefe de campaña de Guerrero.

Personas de nuestro grupo se han reunido con Carlos Rojas, con Javier Guerrero e incluso con el candidato del PAN a la alcaldía de Torreón, Jorge Zermeño, y todos ellos coinciden que la prioridad es –por lo pronto- sacar de la jugada a los Moreira y a Riquelme, y al mismo tiempo pugnar porque las denuncias presentadas ante la PGR, referente al robo de 32 mil millones de pesos del erario coahuilense, por Humberto Moreira y sus cómplices, siga su marcha hasta lograr encarcelarlos. Eso, la cárcel, es lo único deseable y aceptable que se espera de parte de la Procuraduría General de la Nación, porque es incongruente e incomprensible, que sean las autoridades de Texas y de Florida, los que ya han capturado a algunos de los cómplices de Humberto y Rubén Moreira, los que han fingido un distanciamiento entre ambos, para engañar a la opinión pública, a las autoridades federales, y burlar la justicia. Fiscales de Texas se sienten sorprendidos de que el gobierno de Peña Nieto ni siquiera ha presentado denuncia alguna, renunciando a lo robado.

Los priistas contrarios a que Peña Nieto siga apoyando a los Moreira, reitero, ya enviaron a Carlos Rojas a hacerse cargo de la campaña de Javier Guerrero y nos han informado que esta misma semana empezarán a llegar a Coahuila mil 500 operadores políticos, expertos electorales, para sacar adelante la candidatura de Guerrero, y hacer perder a Riquelme, un sujeto impresentable que cuenta con la única gracia de ser cómplice de Rubén y Humberto Moreira, e incluso harán lo que de su parte esté para que en Torreón el vencedor a la alcaldía sea Jorge Zermeño, porque los votos que obtengan Guerrero y Zermeño, descarrilarán el triunfo de Miguel Ángel Riquelme.

Se antoja un tanto Orweliano, que el mismo PRI como el PAN y la ciudadanía coincidan en algo, pero es un hecho que infinidad de priistas estén absolutamente en concordancia con el PAN y la ciudadanía en hacer que Riquelme no logre el triunfo. ¿Por qué? Porque nada sería peor para el PRI que tener dentro de sus filas a un gobernador como Riquelme. Esto lo saben los miembros del PRI en La Laguna, y un segmento importante de priistas del partido en México, Guillermo Anaya, Jorge Zermeño y quienes hemos hecho lo posible por sacar a los Moreira del gobierno del estado. Incluso Riquelme y los Moreira lo saben, y por ello se han apuntado -para blindarse en la impunidad- tanto Humberto como sus hermanos Carlos y Álvaro Moreira, para ocupar tres curules en el Congreso de Coahuila, impulsados por tres partiditos financiados por los Moreira, y con ello tratar de burlar la ley. Es sorprendente la forma dubitativa con la que en este caso actúa el PRI, porque incluso prefieren perder con tal de no verse dentro de una vorágine electoral que los haga perder la presidencia en el 2018. Este relato suena, huele y se ve rarísimo, pero es tan cierto como que me llamo Augusto Hugo Peña. O, ¿usted qué opina, apreciable lector?

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Atenta y respetuosamente

Augusto Hugo Peña D.

Ah.pd@hotmail.com