El Cuerpo Humano según ELLA POURPURA
Marzo 4 del 2014
Sobre (ELLA) El Estado de La Laguna; respuesta a ELLA POUPURA, mensaje a la ciudadanía *Comparaciones como las que hace Federico Sáenz del cuerpo humano con La Laguna, un disparate descomunal
Es extraño el comportamiento de los dirigentes del proyecto (ELLA) El Estado de La Laguna; en su columna en El Siglo de Torreón, con denominación ELLA POURPURA, trata del cuerpo humano para ejemplificar a La Laguna enferma como si se tratase de un cuerpo igual, cuestión errónea ya que en nada se parece un cuerpo humano ni sus características a lo que una comarca es, y menos de una comarca con más de un millón 500 mil habitantes. Con este escrito inentendible, suponen que pueden convencer a los laguneros de adherirse a su cometido. Lo extraño no es lo mal explícito que resulta el escrito de esta semana sino el comparativo de este pequeño escrito con el más extenso de la semana pasada; los dos los firma Federico Sáenz, supongo Sáenz Negrete.
En su escrito anterior, Federico Sáenz arremete contra otros grupos de laguneros, precisamente los dirigidos por Edmundo Gallardo, e incurre en un sinnúmero de desaciertos, comenzando con el que dijo que: “En mayo del 2013 nos reunimos unos auténticos laguneros y conformamos (ELLA)” ¿No será que en mayo, este señor Sáenz y otros fueron convocados a unirse al proyecto (ELLA), el que empezó a conformarse en el año anterior, cuando su presidente y coordinador envió a registro la marca (ELLA) a su nombre, registro en el que aparece domiciliado en Monterrey, Nuevo León? ¡Bueno!... lo que marca la diferencia entre un escrito y otro es lo explícito en agravantes a otros laguneros y la idea inentendible de la comparación de un cuerpo humano, enfermo, con el estado que guarda La Laguna.
He escrito hasta el hartazgo que La Laguna no está enferma porque los de Saltillo y de Durango capital no la atienden ni ven por la comarca lagunera; La Laguna está a la zaga en desarrollo y progreso por culpa de los propios laguneros que no han sabido exigir a los propios, antes que a los extraños, un comportamiento acorde con el bienestar social, la salud, la educación y las cuestiones laborales, cuatro factores que se encuentran en una crisis recurrente cuasi eterna. Quienes dañan La Laguna, lo han venido haciendo durante décadas, con la venia de los gobiernos de los tres niveles; a La Laguna no vienen grandes inversiones foráneas porque la calidad del agua, del aire y del suelo son pésimas, y esta es una de las dos mayores enfermedades que padece la comarca.
La otra enfermedad, no menos grave, la provocan la clase política local y los grandes empresarios; estos últimos en colusión con los primeros han estado depredando los mantos acuíferos y los han estado envenenando; el agua, el aire y el suelo por lo mismo, reitero, no tienen buena calidad y por ello los inversores extranjeros y nacionales, no ven como un destino deseable a La Laguna y prefieren asentar sus industrias, en otros lugares de Coahuila, Durango u otros estados.
Hace diez años, más o menos, en Mieleras se iba a erigir una planta armadora de FORD Motor Co., declinó a ello y se fue a plantar en Sonora; las causas, las que ya expliqué, entonces eso de echar culpas a los políticos de Saltillo o de Durango Capital, es una cantaleta sin sustento.
Entonces, el cuerpo humano si lo queremos comparar con La Laguna, no recibe un tratamiento justo y sabio basados en una mentira, si no en una realidad pasmosa; La Laguna está enferma porque los laguneros que mandan, -políticos y grandes empresarios-, han abusado de ella inmisericordemente y ahora quieren recomponer sus faltas, enredando más las críticas condiciones en que nos encontramos; digo nos encontramos, porque soy un lagunero y soy parte del millón y medio de afectados por malandrines y voraces conciudadanos. Tampoco los resultados basados en los análisis de Federico Sáenz son los atinados, aunque él y sus asociados opinen que La Laguna vive en el abandono y que por ello va a perecer; el abandono es de los nuestros, los malos laguneros y por ello sostengo que La Laguna sobrevivirá a la indiferencia y el abandono de quienes cargan con la culpa; además ¿Cuál es la preocupación del señor Sáenz Negrete? Si los dueños de las empresas que envenenan a La Laguna y le expolian sus recursos, los de LALA, SORIANA, PEÑOLES, CEMEX, entre otros, ni siquiera viven en la comarca, ¿a cambio de qué se presta a este juego que incide como otro daño? O, ¿usted qué opina, apreciable lector?
Atenta y respetuosamente
Augusto Hugo Peña D.
Zuloaga 22 c. p. 27140 Torreón, Coahuila. Tel. Cel. 871 211 95 91 – E-mailah.pd@hotmail.com
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