Robert Fisk se pronuncia sobre Trump, Clinton, Sanders y los judío

Robert Fisk se pronuncia sobre Trump, Clinton, Sanders y los judío

AUGUSTO HUGO PÉÑA DELGADILLO   Dossier ahpd 984   mayo 8 de 2016

La incertidumbre sembrada en la mente de los norteamericanos y más aún en los mexicanos sobre Donald Trump está distorsionada por la prensa judía de EEUU, y en México por la TV, la radio y prensa vendida al gobierno para ocultarnos la cruda realidad. Hay que saber a quién leer para ver que Tump no es un peligro. Para los gringos el peligro es su propio gobierno y para los mexicanos, Trump es un Moloch inventado, el único peligro es el gobierno de Peña Nieto. 

Primeramente hay que saber que Robert Fisk es uno de los ocho periodistas más famosos del mundo por sus altos conocimientos sobre la política internacional y por la forma de explicarla en sus muy atinados artículos en ´The Independent´ en Inglaterra, ´La Jornada´ en México y ´Público´ en España. Radica en Beirut desde hace más de 25 años. Recientemente le ha dado por opinar sobre las elecciones en EEUU y, particularmente ha centrado su atención en Hilary Clinton, por ser una feroz partidaria de los judíos, de Israel y de todo lo que suene, sepa o huela a judío. Ella no es judía pero su mecenas sí, es un judío norteamericano que le ha aportado más de 10 millones de dólares para esta campaña y además, es vicepresidente de la Fundación “Caritativa” y con fines “No Lucrativos” que fundó con la ayuda de su esposo el ex presidente Clinton. 

Robert Fisk opina que el gran error de la campaña de Hilary Clinton y a pesar que va en la punta como favorita es que abiertamente se ha pronunciado partidaria de las políticas de Israel, mismas que han sido condenadas por más de 188 naciones en la ONU y en otros organismos nacionales e internacionales. También hay que darnos por enterados que la política de EEUU hacia Israel y su conflicto contra Palestina no obedece a que los Estados Unidos son pro judíos sino al hecho que el Estado de Israel propiamente no es un estado independiente, depende de la buena voluntad de EEUU y sus aliados europeos, porque utilizan a Israel como una base militar gringa para mantener a raya al Medio Oriente y, de paso utiliza a los judíos de Israel como sicarios, y a los de EEUU y de la diáspora, para que hagan los trabajos sucios –en México y en otros muchos países- que EEUU selecciona para mantener su hegemonía sobre las demás naciones del planeta Tierra. 

Se dice que el nuevo despertar de EEUU es que un judío o una mujer presidan al país. Ya tienen a un negro –Obama- y ahora quieren a Bernie Sanders o a Hilary Clinton. No es casualidad que los blancos WASP –Blancos Anglosajones Blancos- voten por Donald Trump, lo hacen porque ven en los candidatos demócratas –Clinton y Sanders- que son representantes de la judería. Los blancos a los que me refiero son el 62% de los gringos y padecen dos frustraciones. Una. - La del escozor que les producen los judíos porque se han ido adueñando de todo los sectores estratégicos nacionales y de las instituciones, o sea, que los judíos se han convertido en los amos de los gringos, tal y como lo habían hecho en Alemania y Rusia, en las dos primeras décadas del siglo pasado.  

Dos.- Que ven al mexicano como mano de obra que les compite y por ello –piensan- que sus condiciones económicas se han visto reducidas, ya que el sueño americano terminó. Aclarémoslo, no terminó por la competencia de mano de obra mexicana, sino por el neoliberalismo que obligó que para mantener una familia sean dos los que por lo mínimo, trabajen. 

Robert Fisk no sé que piense al respecto pero yo particularmente creo que la frustración de los gringos blancos se debe a que su mayoría son mediocres y por ello creen que votar por Trump les va a salvar de los judíos o de los mexicanos. Se equivocan, estas condiciones socioeconómicas y políticas en EEUU son y están así por los intereses creados, y no solo por los judíos con su dinero y los mexicanos por su mano de obra excelente y barata, sino por la codicia de los grandes capitales, los que ciertamente tienen una parte de capital de judíos, pero en su mayoría no lo son. También creo que Donald Trump no es un peligro para nadie y menos para los judíos, baso esta tesis en lo escrito por Henry Ford en su famoso libro ´El Judío Internacional´, en lo plasmado en ese anónimo espectacular que es ´Los Protocolos de los Sabios de Sión´, en ´Mein Kampf´ de Hitler, en ´Kahal y Oro´ de Hugo Wast, En ´Derrota Mundial´ de un mexicano allegado a la iglesia católica, y a los miles y miles de escritos sobre el comportamiento de los judíos en Israel en contra de los palestinos, y en el altanero papel que juegan en la ONU, orquestado por AIPAC*,  con la venia y padrinazgo de sus amos, una pequeña pero poderosa élite de norteamericanos blancos anglosajones protestantes, muy ricos, codiciosos, sin escrúpulos y muy poderosos. 

Atenta y respetuosamente 

Augusto Hugo Peña D. 

Zuloaga 22 c. p. 27140 Torreón, Coahuila. Tel. Cel. 871 211 95 91 – E-mail ah.pd@hotmail.com 

AIPAC* Máxima organización judía de EEUU encargada del cabildeo para lograr la existencia en el tiempo de Israel como país independiente, y no como lo es actualmente, dependiente de la buena voluntad de los EEUU.