Los pueblos de Coahuila son como Comala, la del libro Pedro Páramo de Rulfo

No uno sino tres Pedros Paramo hay en Coahuila

Julio 14 del 2014

Las ciudades de Coahuila son como Comala, el pueblo de Pedro Páramo, y en ellas veo no a uno sino a varios Pedros Páramo adueñándose de nuestras vidas y haciendas en clara colusión con nuestras autoridades y con no pocos miembros de la oligarquía y autoridades locales.

Pedro Páramo, el famoso personaje de Rulfo, se valía de pistoleros para deshacerse de sus enemigos, del cura para convencer al pueblo, del abogado para torcer la ley y someter a las autoridades a colusiones indeciblemente corruptas, y del dinero para corromper a los revolucionarios. Él personalmente no daba la cara, al igual que no la dan los tres Pedros Páramo que gobiernan Coahuila y se adueñan de las riquezas minerales y de otras índoles, como el agua, coludidos, reitero, con los inútiles gobiernos que hemos tenido que padecer a partir de la llegada de Rogelio Montemayor y su pandilla conformada por los hermanos Moreira.

Los tres Pedros Páramo a los que me refiero son: Alberto Bailleres el de PEÑOLES y Grupo BAL; Germán Larrea Mota-Velazco, dueño de Cananea, Ferrocarriles, Grupo México, Pasta de Conchos y decenas de minas en Coahuila, todas ellas relacionadas con el carbón. Larrea a mi gusto, es una de las siete plagas que México y que los mexicanos padecemos constantemente; El otro es Alonso Ancira de Altos Hornos de Monclova, este es el tercer Pedro Páramo a que me refiero. Compran al gobierno federal, al del estado y de los municipios en donde tienen presencia; son los principales expoliadores del agua que es de todos, y abusan de CONAGUA con un judío al frente, David Korenfeld, el que se encuentra en la nómina oculta de estos depredadores del medio ambiente.

Las otras cuatro plagas que nos cayeron como langostas (Chapulines) son: Emilio Azcárraga el de TELEVISA; Claudio X. González el de Kimberly Clark, Olegario Vázquez Raña, dueño del Excélsior, del Grupo Hospitalario Ángeles y de varias cadenas de hoteles, el Camino Real entre ellos; El cuarto, aunque hay muchos más, es Carlos Salinas, aliado a los de Atlacomulco, padrino de Peña Nieto y dueño de los designios del México, de nuestro actual gobierno, como consecuencia.

Esta trinidad de maleantes, Larrea, Bailleres, Ancira, más cuatro, son los que tocan la flauta para que el gobierno, como perro de circo, baile y se contonee al ritmo de los intereses de ellos, todos ellos se sienten y se ven a sí mismos como filántropos, cuando son todo lo contrario, abusan de su poder para enriquecerse. Compran a la autoridad, la que dicho sea de paso, siempre tiene un precio, el que es pagado con oro y plata y cobrado con bienes de la nación, las que si tuviésemos un gobierno justo, incorruptible y apto, irían a servir al bienestar del pueblo.

En cada pueblo de Coahuila hay un Pedro Páramo presto a coludirse y corromper o eliminar a quienes se le opongan, y cada población es Comala, el pueblo de Pedro Páramo, a donde la justicia no llega, no ha llegado ni llegará mientras esos, los émulos de Pedros Páramo existan. Por lo anterior tengo la impresión que cada una de nuestras ciudades es Comala y que cada gobernante o gran empresario es un pedro Páramo que se adueña de nuestras vidas y haciendas.

O, ¿usted qué opina, apreciable lector?

Atenta y respetuosamente

Augusto Hugo Peña D.

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