La competitividad el precio del gas y el cuidado del agua
Julio 4 del 2014
El discurso y la retórica de los políticos no concuerdan con nuestra realidad; nos mienten a sabiendas que más pronto que tarde nos vamos a percatar de sus acciones falsaria, cosa que les tiene sin cuidado porque le apuestan a que el pueblo mexicano es pusilánime y olvidadizo.
Altamente preocupante es la disparidad del discurso de nuestros políticos y la realidad; hay muchos ejemplos para ilustrar este acierto pero lo haré con tres punto básicos que se han mencionado tanto por el secretario de Hacienda, Luis Videgaray, el de Energía, Pedro Joaquín Coldwell y el presidente Peña Nieto. Se dijo que la gasolina en principio y que los energéticos bajarían de precio al consumidor y luego se aceptó que siempre sí subirían hasta el año 2015 para igualarlo al precio de EEUU. Ya fue rebasado y sigue subiendo el precio en México. También se dijo que lo que bajaría de precio sería el gas, y este día tuvo otro aumento de precio, ¿Cómo creer en nuestro gobierno si en lo cotidiano y entendible nos mienten un día sí y otro también.
Peña Nieto y el secretario del Trabajo dicen que México será competitivo internacionalmente y que no lo será en base a los bajos sueldos de los trabajadores; para que nos engañan, ningún país de América Latina tiene un salario más mísero que el de México y aun así no somos competitivos con otras naciones que mantienen los salarios de los trabajadores mucho más arriba que el salario mínimo mexicano. Este tipo de discursos mentirosos ha provocado que la ciudadanía no les crea ni el bendito al presidente y a sus secretarios, de ahí la precariedad de la gobernanza. Nos dan la impresión que ni idea tienen los que nos gobiernan, que hacer para remediar nuestros males y creen que mintiéndonos van a tranquilizarnos aunque sea momentáneamente. La realidad ya dejó a la zaga los discursos y las promesas del gobierno, por ello considero que el gobierno se ha reconformado en una suerte de desgobierno, harto en ineptitud e ineficacia, y que intentan tapar con mentiras sus incapacidades y o su mala fe.
Peña Nieto acepta que hay escasez de agua en México y que por lo mismo colabora en un pacto para la seguridad hídrica mundial, pero en la praxis hace todo para que empresas privadas sigan expoliando el agua que es de todos y privilegia a empresas que la contaminan. Empresas como LALA, como PEÑOLES, como las multinacionales que este 1º de julio ya empezaron a perforar pozos en el Norte de Coahuila para extraer gas lutita. Cada pozo perforado tiene un gasto de 80 millones de litros anuales y además contaminan los mantos acuíferos, y no es todo, Peña Nieto y el director de CONAGUA, David Korenfeld, están privatizando el servicio de la distribución del agua no solo potable para el consumo humano sino también para cuestiones agrícolas, agroindustriales e industriales, destacando entre estas últimas, las de los ramos minero, energético y metalúrgico.
Como vemos, Peña Nieto nos miente, nos engaña y nos roba a través de las concesiones que les otorga a particulares de los ramos mencionados, ¿eso es competitividad? No, es un robo a la nación y es un asunto tan serio que hay que pararlo, si no, al término de su sexenio nos va a dejar en cueros y en medio de la miseria. O, ¿usted qué opina, apreciable lector?
Atenta y respetuosamente
Augusto Hugo Peña D.
Zuloaga 22 c. p. 27140 Torreón, Coahuila. Tel. Cel. 871 211 95 91 – E-mail ah.pd@hotmail.com
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