David Korenfeld, director de CONAGUA nos muestra su deshonestidad

David Korenfeld, director de CONAGUA nos muestra su deshonestidad

Dossier ahpd 696                                                 abril 2 de 2015

David Korenfeld, el director de CONAGUA debería renunciar por su deshonestidad implícita, sin embargo Peña Nieto, por su probable complicidad con su amigo y socio en otros ilícitos, va a apostarle –como siempre- a que los mexicanos somos olvidadizos, pusilánimes y tontos. Korenfeld hizo uso de bienes de la nación para beneficio de él y de su familia. Debe renunciar.

No es ninguna novedad el que se haya pillado al deshonesto de David Korenfeld, director de CONAGUA en un ilícito como lo es el haber usado el helicóptero de CONAGUA para trasladar a su familia al aeropuerto de la ciudad de México desde Huixquilucan, lugar en donde habita este pésimo funcionario público perteneciente a la pandilla de Atlacomulco. El historial de este judío que por cuota le tocó durante el gobierno de Peña Nieto en el estado de México, hacerse cargo de todo lo relacionado con el agua en ese estado, y que por complicidades implícitas o explícitas, fue nombrado director de CONAGUA debido a ello precisamente, a sus complicidades con el sistema político con base en Atlacomulco, para hacer negocios con el agua que es de todos los mexicanos.

Prueba de su deshonestidad y de su complicidad con grupos del poder financiero nacional y extranjero, es su participación en la privatización del agua de Veracruz para favorecer a una empresa de judíos israelitas a la que pertenece el presidente de Israel, Shimon Peres, quien vino expresamente a Veracruz, México a cerrar ese trato que favorece a una empresa de judíos mexicanos e israelitas y que afecta al pueblo de México. De ese tamaño y de esa calaña es David Korenfel, quien no para en mientes para disculparse por haber hecho uso del helicóptero de CONAGUA para llevar a su familia al aeropuerto de México para irse de vacaciones, y no para llevarlo a él a curarse de algunos males que padece en su rodilla y cadera. Todo fue una burda disculpa que no la cree ni su propia madre.

David Korenfeld, luego de haber sido pillado como un infractor y abusivo funcionario, tuvo la desfachatez de decir que “ya ha hecho el pago correspondiente a la federación por su inexcusable delito, el que el propio Korenfeld considera Peccata Minuta”. Sin embargo no hay disculpas porque este funcionario, quien es a todas luces, deshonesto y enemigo de los intereses del pueblo de México, debe renunciar, es el único camino aceptable y decente. Esto pondrá en apuros al presidente Peña Nieto, el que al parecer ha sido cómplice de Korenfeld en otros asuntos relacionados con la privatización del agua nacional y con el fin avieso de favorecer a unos cuantos empresarios nacionales y extranjeros, en perjuicio de nuestra nación, particularmente de los mexicanos pobres, los que no tienen voz y que son los usuarios mayoritarios de tan vital líquido.

Conociendo el estilo de Peña Nieto que deja pasar los problemas y las crisis apostándole a que los mexicanos somos olvidadizos, pusilánimes y tontos, estoy seguro que no hará nada para remediar esta ligereza de su allegado y amigo David Korenfeld, le dará carpetazo al asunto como pretende hacerlo con los asuntos de Tlatlaya e Iguala/Ayotzinapa en los que el estado mexicano tiene amplia responsabilidad. Peña Nieto ya metió a la Secretaría de la Función Pública para investigar –dice él- pero lo ha hecho –lo digo con certeza- para encubrir a su amigo deshonesto y corrupto.

México ha ido de mal en peor en estos 28 meses en que ha gobernado Peña Nieto, porque todos sus reformas y otras acciones han perjudicado al país en lo social, económico y político; ha metido a los mexicanos y al país en general en un berenjenal por deudas y desatinos, debido a que sus más cercanos colaboradores, como David Korenfeld, Murillo Karam, Emilio Chuayffet, José Antonio Meade Kuribreña y Pedo Joaquín Codwell entre otros, tienen sus orígenes libaneses y judíos, y por ello son gente muy ducha en los negocios pecuniarios pero muy escasos en sus sentimientos nacionalistas mexicanos. Mi razonamiento en este último comentario pudiese parecer racista pero para nada lo es, porque si me atrevo a mencionarlo es porque tengo amplios conocimientos en este asunto en que los hijos y nietos de extranjeros, me consta, aún no han ponderado y madurado su amor por México y menos por los mexicanos de a pie. Una prueba irrefutable de esto es la reforma al artículo 82 Constitucional que infelizmente llevó a Vicente Fox –hijo de extranjero- a la presidencia de la república. O, ¿usted qué opina, apreciable lector?

Atenta y respetuosamente

Augusto Hugo Peña D.

Zuloaga 22 c. p. 27140 Torreón, Coahuila. Tel. Cel. 871 211 95 91 –E-mail ah.pd@hotmail.com