El encarcelamiento de Armando Reynoso Femat, exgobernador de Aguascalientes, nos da esperanza de ver en la misma situación a Humberto Moreira
Mayo 5 del 2014
Un ex gobernador en la cárcel nos da el derecho de soñar que Humberto Moreira también, algún día, irá a hacerles compañía a la maestra Gordillo y a Luis Armando Reynoso Femat.
*Aunque hay que aclarar: Al ex gobernador de Aguascalientes lo pillaron en dos fraudes, uno de 9 millones de pesos y otro de 26 millones, y tanto el juez como el agente del ministerio público dijeron que no es un delito “grave”: puede salir bajo fianza. ¡Ah!, pero no te robes un pollo o un pan, porque eso es grave y más lo es si eres pobre o miserable.
El ex gobernador panista de Aguascalientes ha sido detenido supuestamente por su responsabilidad en un peculado de 26 millones de pesos; ya había sido detenido antes y arregló –provisionalmente- el caso de un fraude al erario, aportando una fianza de 9 millones de pesos, cantidad calculada correspondiente al “negocio” que hizo en la adquisición de equipos médicos para un hospital del estado cuando él era el gobernador. Es extraño ver a un ex gobernador en la cárcel porque la tendencia es exonerarlos a cambio de componendas y arreglos entre el PRI y el PAN. Esta detención nos indica que el PAN, en este momento de cruda división y encarnizada lucha por la presidencia del partido azul, no va a meter la mano y va a dejar a su suerte a Luis Armando Reynoso Femat, el ex gobernador ladrón.
La cuestión grave en este asunto es que Reynoso Femat es tan ladrón como otros gobernadores de todos los estados de la república; para no ir tan lejos por una respuesta a este cuestionamiento, tenemos a Coahuila como la muestra más acabada de la impunidad que cobija a los ex gobernadores, debido a que parte de lo que desvían fraudulentamente va hacia haciendas particulares y hacia sus partidos. Aquí hay ex gobernadores que bien podrían estar en la cárcel y sin embargo andan sueltos y siguen su carrera delictiva al amparo del gobierno y sus partidos. Rogelio Montemayor Seguy, Eliseo Mendoza Berrueto, Humberto Moreira Valdés son la muestra más viva y esclarecedora de la impunidad que impera en México.
Creo que les haría feliz a los ciudadanos saber –por ejemplo- que Humberto Moreira fuese encarcelado y no por el desvío del erario de 26 millones de pesos sino de miles de millones que se esfumaron y que fueron a parar a muchos bolsillos y a la campaña de Peña Nieto. Por lo mismo a este señor Moreira no lo tocarán ni con el pétalo de una rosa porque “supo repartir” lo que se robó, y el PRI ahora en la presidencia, de ninguna manera hará nada por encarcelarlo, ni a él ni al ex gobernador interino Jorge Torres; además, el Congreso del Estado con mayoría priísta le avaló sus trapacerías y se las seguirá avalando porque así funciona este gobierno. La línea es: “Cuanto aportaste a otros y al partido, tanto o más tendrás de amparo e impunidad.” Así están diseñados los sistemas de gobierno en México.
Moreira diseñó una frase para denominar su gestión, “El Gobierno de la Gente” fue la frase para identificarse, ya que en efecto, era el gobierno de la gente pero le faltó agregar “de la gente jodida y defraudada.” Aun así es plausible la detención de Reynoso Femat porque ello nos da un girón de esperanza de ver a Moreira, a Montemayor o a Eliseo Mendoza en chirona.
Algún día podría ser, ojalá que sea pronto y, que conste, lo digo porque nada sería más saludable para el gobierno de Peña Nieto, que permitir que siquiera uno de estos tres sea encarcelado. Si Peña Nieto ponderase adecuada e inteligentemente esta posibilidad, ganaría infinidad de puntos a su favor y no como en el caso de la maestra Gordillo, la que fue difamada hasta el hartazgo para luego tenerla en un penal de alta seguridad para que no salte la barda. Nunca ningún presidente en los últimos 66 años hubo tenido tan baja calificación como tiene Peña Nieto, ni Calderón siquiera y eso es ya decir mucho. ¿Hará algo para mejorar la percepción que de él tienen los mexicanos? He ahí el dilema, si Peña Nieto nos cumpliera y fuera quien nos gobernase y no tuviera tras de él a Salinas y a la pandilla Atlacomulco, probablemente tomaría la decisión de encarcelar a alguno de ellos. O, ¿usted qué opina, apreciable lector?
Atenta y respetuosamente
Augusto Hugo Peña D.
Zuloaga 22 c. p. 27140 Torreón, Coahuila. Tel. Cel. 871 211 95 91 – E-mailah.pd@hotmail.com
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