En la ronda 1 de la privatización del petróleo el beneficiario Carlos Salinas
Augusto Hugo Peña Delgadillo Dossier ahpd 744 julio 17 de 2015
Los únicos beneficiarios en La Ronda Uno para la licitación de espacios en aguas someras para la explotación del petróleo, fueron Carlos Salinas de Gortari por medio de su cuñado Hipólito Gerad Rivero y Juan Armando Hinojosa Cantú, dueño de la Constructora Higa que fue la que le obsequió las casas a Angélica Rivera en Las Lomas y a Peña Nieto en Ixtapa de la Sal.
México funciona como país pero muy mal, debido a la corrupción e impunidad. En la ronda 1 para la privatización de áreas petroleras, los únicos adquirientes de dos espacios para la exploración y explotación de petróleo, los “ganadores” fueron Carlos Salinas de Gortari y su cuñado Hipólito Gerard Rivero quien junto a Juan Armando Hinojosa Cantú, socios de la empresa ganadora, (Sierra Oil & Gas). Gerard Rivero es cuñado de Carlos Salinas, y Armando Hinojosa es el dueño de la Constructor Higa que le regaló la casa a Peña Nieto a nombre de Angélica Rivera su esposa. ¡Esa es la transparencia y combate a la corrupción de las que tanto presume Peña Nieto!
Es tan descarada esta licitación petrolera como todas las acciones de Peña Nieto quien se ha empeñado en enriquecerse a costa de los mexicanos abusando del poder y la influencia que le dan el ser el presidente de México y parte consustancial de las pandillas políticas y empresariales que lo llevaron –aunque de manera espuria- a Los Pinos para no gobernar sino para partirle la madre al país. Peña Nieto –lo vemos, lo sentimos y lo olemos- es un inepto y harto especialista en todo lo que huela a corrupción e impunidad. Esto lo podemos aquilatar con el episodio de las casas que le obsequió el señor Hinojosa Cantú a cambio de favores y en los tristes y graves casos de Tlatlaya, Ayotzinapa y Apatzingán entre otros. Ahora con la fuga del Chapo Guzmán solo nos queda el mal sabor de sentirnos tan mal gobernados que la frustración general ya nos ha invadido.
Tenemos plenamente identificados a los responsables de la fuga del Chapo, son el gobierno federal, el régimen priísta que nos mal gobierna y el estado mexicano que se encuentra en manos de los peores, haciendo de nuestra flaca democracia una formidable kakistocracia (el gobierno de los peores). ¿Tenemos alguna esperanza de ver en el corto o mediano plazos a un México próspero y desarrollado para el beneficio de las mayorías? ¡Ninguna! Ese es nuestro destino inmediato y a mediano y largo plazos.
Veamos que está sucediendo en México: Mientras los gobiernos en todos los niveles están abocados con el total de sus esfuerzos a costos altísimos –humanos y económicos- para recapturar al Chapo, muchos de los pillos que nos gobiernan asociados con empresarios, igualmente deshonestos, se están haciendo de los bienes de la nación y todo ello en detrimento de la economía y la paz social de más de 120 millones de mexicanos.
Mientras el Chapo se hace escurridizo, acá en Coahuila Rogelio Montemayor y Rubén Moreira con sus socios de PEÑOLES de Alberto Bailleres y del Grupo Minero México de Germán Larrea se enriquecen a lo bestia explotando el gas Lutita y otros productos energéticos malgastando el agua que debiera ser potabilizada en primera instancia para abastecer a la población.
¿Y hay alguien que pare a esta caterva de gobernantes y empresarios que expolian el agua y explotan el gas de manera poco ortodoxa y altamente contaminante por medio del (Fracking) para el beneficio de unos cuantos y contra los intereses de las masas humanas (122 millones de mexicanos)? No, en lo absoluto no, no tenemos a nadie ni recursos siquiera para parar a estas pandillas que están llevando a México y a los mexicanos a estadios desconocidos e inciertos. Lo grave pues es que con la fuga del Chapo Guzmán que mantiene ocupado a todos los gobiernos de los tres niveles, y con ello el descuido a las pocas instituciones que ven por los más necesitados, los pobres cuasi miserables, haciendo al sector mayoritario de mexicanos, sumamente vulnerables ante el abandono y miseria en que se encuentran. O, ¿usted qué opina, apreciable lector?
Atenta y respetuosamente
Augusto Hugo Peña D.
Zuloaga 22 c. p. 27140 Torreón, Coahuila. Tel. Cel. 871 211 95 91 – E-mail ah.pd@hotmail.com
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