Carta a la ciudadanía
Dossier ahpd 102 Rubén Moreira y la transparencia
Octubre 22 del 2013
Rubén Moreira habla de transparencia en Coahuila; que no me haga reír. ¿Es burla acaso?
Me topé con una noticia en un diario local en la que Rubén Moreira dice que Coahuila va por el rumbo de la transparencia. ¡Qué barbaridad! Si no echa esa revienta. ¿De qué trasparencia habla? Que yo sepa el lodo no es transparente y las cosas –políticas y de muchas índoles- en Coahuila, son menos trasparentes que la obsidiana. ¿Estaré en lo cierto al pensar que Moreira piensa que los habitantes de Coahuila somos lerdos, o sólo es mi percepción personal? Si hubiese transparencia o intenciones de su gobierno en transparentar lo que el gobierno del estado de Coahuila ha hecho y hace, saldrían a la luz todos los topillos de la megadeuda en la que su hermano Humberto está metido hasta el cuello, y también el caso descarado de la compra de terrenos y fincas de Torreón para erigir la Plaza Mayor que de mayor sólo tiene el nombre. También sería saludable que fuese transparente en lo relativo al agua, al arsénico, al cadmio, al plomo y a otras tantas sustancias químicas dañinas que los habitantes de La Laguna nos tragamos, respiramos y bebemos.
Considero que Rubén Moreira nos falta al respeto en grado superlativo y pienso que hay que unir voluntades para bajarlo del pedestal demagógico y ruin en el que está encaramado por razones circunstanciales y porque precisamente la opacidad, contraria a la transparencia gubernamental, es la que impera en ese medio podrido que suele llamársele de la clase política, cuando de política, lo que es política, carece totalmente sin fundamento y razón. No entiendo como a este señor se le ocurre, una y otra vez, un día sí y otro también, vernos la cara de tontos y todavía restregárnoslo en nuestras propias narices. Esta actitud asumida por Moreira y esta falta de respeto al pueblo que juró servir es inadmisible por ser traición. Bueno… a menos que nos consideremos faltos de merecimiento de respeto, o asumamos que somos estúpidos por antonomasia.
Hace meses un mercenario de la pluma y del medio cultural de apellido Castañón Cuadros, tuvo la liviandad de escribir en la prensa una declaración en el sentido que se decía corresponsal de equis Monitor de Transparencia gubernamental y ciudadana; lo dijo frente a Eduardo Olmos y lo conminó a seguir por la vía de eso, la transparencia; me pareció deleznable su actitud, pero viniendo de quien viene, lo pasé por alto precisamente porque le sé columnista mercenario como tantos que hay, pero que un señor gobernador se bote la puntada de hablar de transparencia en el Coahuila de los Moreira, y más apellidándose Moreira, no tiene nombre, es una desproporción brutal porque atenta contra su juramento, contra la inteligencia y la dignidad de su pueblo; por ello reitero que tenemos que unir voluntades ciudadanas para hacer que este señor rectifique el rumbo al que dirige dolosa y erróneamente nuestro destino. O, ¿usted qué opina al respecto apreciable lector?
Atenta y respetuosamente
Augusto Hugo Peña D.
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